Discurso pronunciado por Manuel Belgrano

Jujuy, 25 de mayo de 1812

 

"Soldados, hijos dignos de la Patria, camaradas míos: dos años ya que por primera vez resonó en estas regiones el eco de la libertad y él continúa propagándose hasta por las cavernas más recónditas de los Andes; pues que no es obra de los hombres, sino del Dios Omnipotente que permitió a los Americanos que se nos presentase la ocasión de entrar al goce de nuestros derechos; el 25 de mayo será para siempre memorable en los anales de nuestra historia y vosotros tendréis un motivo más de recordarlo, cuando veis en él por primera vez, la bandera nacional en mis manos, que ya os distingue de las demás naciones del globo, sin embargo de los esfuerzos que han hecho los enemigos de la sagrada causa que defendemos, para echarnos cadenas y hacer más pesadas que las que cargaba. Pero esta gloria debemos sostenerla de un modo digno con la unión, la constancia y el exacto cumplimiento de nuestras obligaciones hacia Dios, hacia nuestros hermanos, y hacia nosotros mismos, a fin de que la Patria se goce de abrigar en su seno hijos tan beneméritos, y pueda presentarla a la posteridad como modelo que haya de tener a la vista para conservarla libre de enemigos, y en el seno de su felicidad. Mi corazón rebosa de alegría al observar en vuestros semblantes, que estáis adornados de tan generosos y nobles sentimientos, y que yo no soy más que un jefe a quien vosotros impulsáis con vuestros hechos, con vuestro ardor, con vuestro patriotismo. Sí, os seguiré imitando vuestras acciones y todo el entusiasmo de que sólo son capaces los hombres libres para sacar a sus hermanos de la opresión. Ea, pues, soldados de la Patria, no olvidéis jamás que nuestra obra es de Dios; que él nos ha concedido esta Bandera, que nos manda que la sostengamos, y que no hay una sola cosa que nos empuje a mantenerla con el honor y el decoro que le corresponde. Nuestros padres, nuestros hermanos, nuestros hijos, nuestros conciudadanos, todos, todos, fijan en nosotros la vista y deciden que a vosotros es a quienes corresponderá todo su reconocimiento si continuáis en el camino de la gloria que os habéis abierto. JURAD CONMIGO ejecutarlo así, y en prueba de ello repetid: ¡Viva la Patria!". (Archivo capitular de Jujuy)

 

 

ADIÓS, JUJUICITO, ADIÓS. El Éxodo en la Literatura de Jujuy.

Antología Herminia Terrón de Bellomo María Soledad Blanco (Comp.)

Tiraxi Ediciones 2020