Laura Barberis
Hablemos de polÃtica
Las palabras que ruedan hoy por hoy en Jujuy -hablando de polÃtica, claro- sólo revelan algún significado por lo que no dicen. Se supone que no hay censura, asà que el lenguaje en boga, de un sopor anodino, es voluntario. Qué nos pasa que hay tan pocas palabras en los medios, como es que el discurso, el relato de nosotros mismos, de nuestra vida cotidiana, de carencias y propósitos, de esperanzas y frustraciones, de miserias y fortalezas, la realidad propia o impropiamente dicha, no toma estado público.
Por ejemplo el peronismo se expresa casi exclusivamente a través de las palabras, -extrañas por cierto- del presidente del Bloque de Diputados del PJ. Ocasionalmente dice algo el vicepresidente primero Eduardo Cacho Alderete, y alguna de esas veces, muy de tanto en tanto, sus palabras definen, casi como en una destilerÃa prohibida de bebidas blancas, furias y broncas por la cosa en que ha devenido el peronismo local.
Por su parte el principal referente, presidente del PJ y de la Cámara Baja  Eduardo Fellner, estos dos últimos años, sólo de cuando en cuando sale a decir algo, en general vinculado a la necesidad de apoyo de algunas medidas tanto del gobierno local como del nacional; curiosa actitud de un polÃtico que siempre convocó con sus palabras, casi el único orador importante de la provincia, ¿se acuerda como convencÃa Fellner hasta hace pocos años cuando hablaba? Dejó de hablar, casi no lo hace ni aquà ni allá.
El gobernador Walter Barrionuevo en los años ya aludidos ha hablado muy poco, casi siempre cuando los medios -que en general dejan simplemente el micrófono abierto- lo rodean antes o después de algún acto público; habla con parsimonia, suele tirar ideas pero sus palabras no prenden en la gente, aunque se advierte un hilo discursivo, sobre todo si se leen las editoriales de Pregón los lunes, donde, si bien reconozco que el escribidor muestra estilo y gracia a la hora de interpretar, siempre queda la sensación que en el origen de los conceptos y del mensaje que se quiere bajar hay una notable ausencia de criterio de realidad; como que falta contacto con la gente que anda por la calle. Como ya pasó, su discurso de apertura de las Ordinarias causó sorpresa, sorpresas, más bien.
El vice gobernador Pedro Segura, por su parte, muestra todos los dÃas a quién recibe y a quién visita, también las acciones de la Fundación que preside. En los reportajes, antes o después de un acto, explica las debilidades y preocupaciones del Ejecutivo pero cuando va a algún medio radial o televisivo y tiene tiempo de explayarse, no deja de reiterar cómo hará él las cosas si llega al sillón de Fascio y cómo es su proyecto para la provincia, con un sentido crÃtico permanente respecto de la dinámica de la actual gestión.
El senador Guillermo Jenefes ha demostrado últimamente, documento público de por medio -a raÃz de los dimes y diretes de la ley del Cheque, escraches a sus empresas, etc.- que puede lograr empatÃa con la gente; por lo menos esa vez sus dichos obtuvieron la aprobación de muchos.
Con matices, se observa lo mismo en la Unión CÃvica Radical. Todo lo que se dice es tan previsible como que la noche sigue al dÃa. Gerardo Morales da unos pasos rasantes por acá y, salvo cuando habla de los temas nacionales -en Jujuy o en Buenos Aires- tampoco ejercita el valor de la palabra. El presidente del partido que, con muchos brÃos, le ponÃa el pecho a casi todos los temas al principio de su mandato, apaciguó el discurso hasta el murmullo. El intendente Chuli Jorge las usa (las palabras) con más respeto, suavemente dice cosas que tienen que ver con la necesidad de cambios, pero es demasiado sutil para la época ¿o cuidadoso? Curiosamente, también en la UCR el que sale con el mensaje oficial es el presidente del Bloque de Diputados del PJ. A veces Jorge Rizzotti avanza con ira sobre algunos temas y Mario Pizarro trata de resguardar los valores de siempre; pero en general los silencios o las definiciones muy, pero muy acotadas, son el pan de cada dÃa, igual que los peronistas.
¿A qué atribuir esa falta de contenidos¿ ¿Será que hace demasiados años que son los mismos?¿Será que la cuestión de las organizaciones sociales los abruma y asusta de cara al futuro? ¿Será que se han vuelto tan educados que temen molestar a propios y ajenos y por eso son tan cuidadosos que parece que la sangre se les hubiera aguado?
La información que manejan los medios es escasa y muy condicionada por los partes de prensa de cada sector; los pocos periodistas que opinan están constreñidos a la bajada de lÃnea del o los patrones. Â
Pero no es solamente en el ámbito de la polÃtica, el largo paro docente mostró analogÃas concretas en el discurso de los dirigentes y el confuso diálogo de ellos y el gobierno y las permanentes contradicciones entre pares. Lo mismo en la cuestión del transporte urbano, la pelea por los 10 centavos tuvo la furia de una cruzada pero en ningún momento se cuestionó el aumento (mucho, muchÃsimo mayor) de la carne, la leche, el pan, la ropa, etc.
Supongo que el hecho de que las palabras públicas sean tan huecas hoy en Jujuy está directamente relacionado con todas las cosas de las que no se habla por miedo, por interés, por codicia y por el resto de los pecados capitales.
Cómo estarán las cosas que lo más emocionante que pasa una vez al mes es el informe de coyuntura del Consejo de Ciencias Económicas.
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