Municipalidad de Jujuy Jujuy en L�nea Diario Jujuy
San Salvador de Jujuy - ARGENTINA /

Hotel Gregorio
Finca La Colorada

Hotel Gregorio

 

 

Pablo Baca

Para que las embarazadas
puedan seguir sus estudios

Una propuesta para la continuación de sus estudios

Pablo Baca


      Esta nota afirma tres puntos: a) El embarazo y la maternidad adolescente significan para las jóvenes y también para sus hijos o hijas, enormes dificultades y riesgos. b) Cuando se presenta esta situación, en una gran proporción las jóvenes se ven impedidas de continuar sus estudios. c) Lo anterior justifica y reclama de políticas sociales y educativas que contribuyan a mejorar la calidad de vida y las oportunidades de embarazadas, madres, hijos o hijas.
      La primera de las afirmaciones tiene fundamentos fácticos que no requieren de pruebas. Es evidente para cualquiera, que una joven de un grupo de escasos recursos, que se encuentre terminando estudios primarios o cursando la secundaria o un terciario, ante el embarazo y la maternidad enfrenta complicaciones que le tornan imposible o muy difícil la continuación de esos estudios.
      Lo dicho se ve corroborado con algunos relevamientos de información efectuados en nuestra Provincia. Cruzando datos que han sido reunidos en el “Sistema de Indicadores Sociales Sobre Niñez y Adolescencia en la Provincia de Jujuy” -elaborado por UNICEF en un convenio con el Gobierno de Jujuy-, aparece una relación entre el índice de nacimientos de hijos o hijas de madres adolescentes y el abandono de estas de sus estudios. La denominada “Tasa de Abandono de Nivel Medio”, en particular, sigue una curva similar a la que siguen el porcentaje de niños nacidos vivos de madres que cursan esos estudios. En otras palabras, el aumento del porcentaje de jóvenes que abandonan en el nivel medio de estudios, es directamente proporcional al porcentaje de niños nacidos vivos de madres de entre 10 y 19 años de edad. 
      Los datos muestran, además, que cada año un número importante de adolescentes y jóvenes se convierten en madres. Una primera consecuencia, ya señalada, es que disminuyen las posibilidades de estas jóvenes de permanecer en el sistema educativo. En esto los datos no dejan margen a dudas. La situación en la que se encuentran estas jóvenes, sin embargo, no sólo conspira contra sus estudios. Afecta el conjunto de sus oportunidades presentes y futuras y constituye una fuente de riesgos para ellas mismas y para sus hijos o hijas.  Los riesgos naturalmente son de todo tipo y no es posible establecer de qué modo incide cada uno. Pero como el mayor de los riesgos es la muerte, la exposición a este riesgo resulta indicativo de la vulnerabilidad en que se encuentran estos hijos o hijas. Hay una relación entre la tasa de mortalidad infantil y el nivel de instrucción de la madre. A menor nivel de instrucción de las madres, mayores son los porcentajes de mortalidad infantil. Un niño de una madre analfabeta tiene más posibilidades de morir que uno de una madre con estudios primarios. Un niño de una madre con estudios primarios, a su vez, tiene más posibilidades de morir que uno de una madre con estudios secundarios.
      Hay también una estrecha relación entre la tasa de mortalidad infantil y la edad de las madres. Cuanto menor es la madre mayor es la mortalidad infantil. La tasa de mortalidad infantil según la edad de la madre es de 16,9 por mil en la franja de jóvenes menores de 14 años, de 15,5 por mil en la franja de entre 15 y 19 años, de 14,2 por mil de entre 20 a 24 años y de 9,7 por mil de entre 25 a 29 años. La variación en la tasa que se relaciona con la edad es enorme. Se la percibe cuando se toman los valores de ambos extremos. Va de 16,9 por mil en los casos en que la madre es menor de 14 años a 9,7 por mil en aquellos en que la madre es mayor de 25 años. 
      Un dato más general, pero que también corrobora lo anterior, es que el porcentaje en Jujuy de mujeres con educación incipiente o nula es mayor al de hombres de igual edad.  Hasta aquí el desarrollo de los puntos planteados al principio como a) y b). De ello resulta, como se indicó al principio en c), que es necesaria una especial tutela por parte del estado. Existen obligaciones éticas elementales. Una democracia –se suele decir- debe propender a una igualitaria distribución del poder, del saber y del haber. Para esto hace falta otorgar beneficios y ventajas a los que se enfrenten a mayores dificultades.
      También hay normas que obligan a actuar. La “Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación Contra la Mujer” establece el derecho de las mujeres al acceso sin discriminación a la educación, al empleo y a las actividades económicas y sociales. Según la misma Convención, el papel de la mujer en la procreación no debe ser causa de discriminación. Por el contrario, la Convención promueve la protección de la maternidad y el cuidado de los hijos. Por otro lado, la “Convención de los derechos del Niño”, a lo largo de todas sus disposiciones, persigue una protección especial para niños y niñas y la mayor garantía posible de sus oportunidades futuras.
      He querido usar la oportunidad de hacer una nota para El Ojo de la Tormenta para señalar esta situación de necesidad y desamparo. Es una situación directamente incompatible con los derechos mínimos que tiene que asegurar un estado democrático.
      Ahora, si se me permite, aprovecho para promocionar un proyecto que tiene por objetivo acercar ayuda a estas jóvenes. Conjuntamente con el bloque de diputados de la U.C.R., propusimos un programa de becas para jóvenes estudiantes que se encuentren embarazadas o que tengan uno o varios hijos. El beneficio está destinado a permitirles iniciar, retomar, continuar o concluir sus estudios hasta su finalización o el cumplimiento de los 21 años de edad.
      Constituye una medida de política social que atiende un momento y una circunstancia en la vida de las jóvenes y sus hijos o hijas, que reclama una protección especial. La forma en que se propone la ayuda, el beneficio que corresponde por la situación misma, excluye la posibilidad de que se use de la discrecionalidad para negar el derecho o para condicionar de cualquier modo a las jóvenes.
      Es obvio que la propuesta no es suficiente para superar el conjunto de dificultades a que se enfrenta. Hacen falta también políticas de salud, tanto respecto de las madres como de los niños y niñas. Sólo a título de ejemplo, hacen falta controles prenatales adecuados, derivaciones oportunas, centros médicos adecuados, etc. Es necesaria una política activa de cuidado de los riesgos que afectan a los hijos e hijas de madres adolescentes o jóvenes. La ayuda para la continuación de los estudios, por otra parte, tiene que ser acompañada por una política educativa.
      No obstante, con todas estas limitaciones, la beca propuesta, con no ser suficiente, contribuye a mejorar la situación y propende en forma efectiva a su objetivo específico, que es la continuación y la culminación de los estudios.


*Diputado provincial UCR.






espacio del lector
Nombre/seudónimo*
Edad * años
E-mail *
Comentario *
 
IMPORTANTE: Está terminantemente prohibido incluir agravios, calumnias, insultos, ataques a terceros, lenguaje inapropiado o cualquier comentario discriminatorio. Recordamos que no se publicarán comentarios que no respeten las reglas.


·
·
·

Copyright © 2008 El Ojo de la Tormenta - Reservados todos los derechos.

Lavalle 261, Oficina 5—Bº Centro - San Salvador de Jujuy (4600) - Jujuy - Argentina.
Teléfono: 0388-4235343 / Fax: 0388-4235343 - Correo: info@elojojujuy.com.ar

.   .