Nelly Anachuri

      Más de setecientas jugadoras de básquet estuvieron en la provincia durante una semana. Las “chicas” se alojaron, comieron, pasearon y gastaron en Jujuy. La organización del Octavo Campeonato Argentino de Maxibásquet le dejó al deporte jujeño muchos temas positivos para analizar, sacando como conclusión principal, que cuando se quiere se puede. Con dirigentes comprometidos a ascender y luchar por el deporte que organizan y al que le han dado su vida. Esta vez gracias al básquet, Jujuy fue provincia de estadía y no de paso, ésta vez el deporte aportó al turismo y a la difusión de una provincia no tan promocionada en el país.
      El primer punto de análisis tiene que ser la convocatoria que hicieron Nelly Anachuri y las dirigentes de la Asociación Jujeña de Maxibásquet, nadie faltó a la cita, se vinieron todas y algunas con familias incluidas. Por una semana las canchas de Luján, San Martín, Primero de Marzo y José Hernández estuvieron colmadas de público, al que mediante la difusión se los incentivó a ver básquet, que no fue profesional, pero sí mostró un nivel para tener en cuenta. Ese es el segundo punto, si bien estamos hablando de Maxibásquet, no hay que subestimar el juego que tuvieron las chicas del país en una semana, jugando dos partidos por día, con un frío intenso y poniendo la mejor cara.    
      Amigos, hace cuánto que no vemos un torneo de básquet femenino a nivel nacional organizado por la Asociación Jujeña, hace cuánto que no vemos básquet competitivo entre clubes de la provincia, que se supone albergan a las futuras jugadoras profesionales de Jujuy. La Asociación local tiene afiliados cuatro o cinco equipos que juegan entre ellas todo el año y siempre llegan a la final Gorriti y Luján. En el Maxi hay más de 50 equipos en todas las categorías, en Palpalá hay una Asociación que reúne a más de 500 jugadoras todos los fines de semana. Entonces cómo puede ser que una Asociación de Maxi, tenga más organización, disciplina y convocatoria que una institución madre de las otras. Increíble y no quiero involucrar sólo a la Asociación Femenina, pasa lo mismo con el básquet masculino, torneo en el que juegan ocho equipos y que se las tienen que ingeniar para dividir el año con tres campeonatos, “preparación, apertura y clausura” y siempre juegan los mismos, no hay movimiento, no hay competencia y los dirigentes asentados hace años en la conducción no se preocupan por mejorar el nivel o por llenar la cancha aunque sea en un partido clásico. Porque las canchas del maxi o la de los veteranos en fútbol, casi siempre están llenas y en las ligas locales, de donde deben salir los futuros deportistas, no hay nadie, sólo los padres de los chicos. Algo pasa. Ustedes, dirigentes, ¿se hicieron un replanteo, se dieron cuenta cómo estaban las canchas con la organización del Argentino de Maxi?, ¿no fue una cachetada para ustedes?, ¿qué dicen de todo esto?, ¿se hacen cargo?, muchas preguntas que a lo mejor no tendrán respuestas, pero que debe ser un verdadero tirón de orejas para los que manejan el básquet federado.

Entusiasmo: jugadoras y sus hijos.

      Lo que hizo la Asociación Jujeña de Maxibásquet es un ejemplo a imitar, le duela a quien le duela, hubo constancia para organizar el torneo desde el año pasado, mientras se jugaba el campeonato local, hubo convocatoria, cosa que los popes del deporte federado no lograron nunca, salvo esos torneos nacionales de la década del 60’ que se jugaban en la Federación. Siempre se escuchan críticas porque falta una política deportiva, pero qué hacen ellos, nada, sólo critican. Los dirigentes están desapareciendo y los pocos que quedan, sólo quieren mantener el cargo, nada más. Podemos traer miles de torneos a Jujuy, pero si no tienen convocatoria, no sirve de nada. De qué nos sirve organizar en la provincia campeonatos de categorías menores si no va nadie, sólo los familiares. ¿Por qué no se difunden los eventos que se realizan?, ¿por qué no se intenta hacer algo distinto para cambiar el rumbo? Hasta ahora la respuesta que tengo, es porque no les interesa, no les importa, pero siempre la culpa la tiene el Estado, al que también le faltan ideas para promocionar al deporte o encuentra siempre trabas para hacerlo.         
      Volvemos a caer en el tema del deporte de elite, el fútbol de Gimnasia en la B Nacional, institución seria que se mantiene vigente con un presidente que hace más de 20 años está a cargo, pero que sigue de la misma manera exitosa por donde se la mire, más allá de los resultados deportivos. La Copa América en Jujuy se da gracias a la perseverancia de un dirigente como Ulloa que por fin encontró respuestas en el Estado a través de alguien ligado al deporte y que sabe cómo hay que manejar el circo, estoy hablando del ministro Fernando “Chapi” Frías, el primero que apostó a que Jujuy reciba en el 2011 a cuatro selecciones para jugar al fútbol en el 23 de Agosto. Después apareció el discurso del gobernador y el intendente diciendo que van a apoyar, bienvenido sea, porque también de ellos depende la política deportiva de la provincia, la que parece quiere despertar imitando a Salta, a la que no le importa perder plata por llevar a su provincia a River, San Lorenzo, Independiente o Boca, si gracias a esos clubes muestran sus paisajes, asumen el costo a cambio de que los salteños también vean deporte de primera. Como ocurre también con el Rally Dakar 2011, que pasará por Jujuy, apuesta única al desarrollo deportivo y turístico de la provincia, esas son las cosas que hay que celebrar: el compromiso de dirigentes que encuentran apoyo en nuestros representantes y que piensan en mostrar la provincia a través del deporte, más allá del beneficio político que a ellos seguro les sirve. Por eso digo que no es poco lo que hicieron las autoridades del maxibásquet en Jujuy, hay que felicitar a quienes organizaron el Torneo Nacional, que incluye comida, alojamiento, traslados, canchas de juego, reloj de primera para algunos escenarios que no lo tenían, por ejemplo Luján, alquileres de canchas como la del “José Hernández” que sabemos no es barata, ya que extrañamente no se jugó en el estadio de la Federación, madre de este deporte.

Con el intendente Jorge.

      Me dirán que estoy exagerando en los conceptos y que sólo se trató de un torneo de maxi, pero quiero que me expliquen por qué esta categoría, supuestamente no competitiva, puede convocar y otros torneos no. No será que pasa por la dirigencia, que tiene ganas de hacer cosas, vender empanadas, organizar rifas, sortear algunos premios, ni más ni menos que volver a la fuente. “Querés tener algo bueno, hacé y no pidas tanto”, más allá del apoyo de una secretaría de Deporte o de una intendencia, que, como organismos oficiales, lograron entender el mensaje. El acto inaugural parecía el de cualquier torneo argentino de profesionales, los partidos finales mostraron tribunas colmadas con gente del deporte que se regocijaba de ver un partido con hinchas alentando y gritando por sus jugadoras, ya sea de más de treinta años o de más sesenta y cinco, categorías en las que Jujuy fue protagonista., como lo fue Mendoza en más 40 o las rosarinas y las cordobesas en otras. Una vez más, felicito la organización y la preocupación por difundir en los medios este torneo y pido que muchos dirigentes tomen como ejemplo a seguir el manejo del evento, del cual cada jugadora se llevó una medalla tallada con los cerros de Jujuy y nuestra Quebrada de Humahuaca. A cada jugadora le quedó claro qué es Jujuy y cómo se vive en esta provincia, agradecidas y emocionadas se fueron, porque por una semana ellas se convirtieron en las estrellas del deporte nacional, gracias a un recibimiento único y que debería imitarse en otros deportes.
      Animarse a ser dirigente cuesta cada vez más, pero los que ya están y no quieren hacer, deberían dejar el camino libre, imagínense a Jujuy sede de un Campeonato Argentino Profesional, ¿por qué algunos pueden y otros no?. Hay que pensar en grande y no sólo en los intereses personales, hay que intentar cambiar, los ejemplos son contundentes.