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      MarÃa José Ãlvarez Carreras es integrante de la Organización No Gubernamental Juanita Moro, trabaja en la prevención de la trata de personas en Jujuy, una temática en la que se cruzan la lucha contra la violencia hacia mujeres, niños y adolescentes; la capacitación sobre derechos; la necesidad de trabajo en conjunto entre los estamentos del estado y las asociaciones, entre otras cuestiones que complejizan el tema, desde las escasas estadÃsticas hasta las dificultades para lograr información de organismos como GendarmerÃa.
      âEn realidad me acerqué al movimiento de mujeres a partir de mi práctica en salud pública, como odontóloga, y desde allÃ, me metà cada vez más en este área. Cuando hablamos de trata de personas hacemos referencia a la captación, transporte y traslado de personas con fines de explotación, como la prostitución, trabajos forzados, esclavitud, servidumbre o extracción de órganos; antes se decÃa âtrata de blancasâ, porque en Argentina hubo una red manejada por inmigrantes que traficaban con mujeres de Europa del Esteâ, explicó MarÃa José Ãlvarez Carreras, de la ONG Juanita Moro, a la vuelta de una serie de talleres de empoderamiento a mujeres jóvenes en La Quiaca.
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MarÃa José Ãlvarez Carreras. |
      Y continuó diciendo âen la ONG trabajamos en un proyecto cuyo objetivo es prevenir de la trata y violencia en general; la idea es capacitar a las jóvenes y promover que conozcan cuáles son sus derechos y motivar a que se organicen para hacer pedidos de informes, hacer actividades de impacto y a la vez informar quiénes tienen a cargo combatir este delito. La ONG pertenece a la RATT (Red Alto al Tráfico y la Trata: http://www.facebook.com/profile.php?id=100000153576708; http://www.ratt.org.ar/) con la cual realizamos un foro local en Fraile Pintado y también forma parte con la red âMujeres al bordeâ, con este proyecto estamos trabajando en La Quiaca y en San Salvadorâ.
      Respecto de la diferencia con el tráfico de personas, Ãlvarez Carreras explicó âpor tráfico se entiende la facilitación de la entrada ilegal de una persona de un paÃs al otro. Los componentes básicos son el cruce de la frontera, un cruce irregular o clandestino. El tráfico implica la asistencia de un tercero que facilita ese cruce. En estos delitos es común que haya corrupción para poder llevar adelante estoâ.
      En cuanto a la labor en conjunto que realizan con diversos entes, comentó que articulan con el Comité de Frontera âdepende de CancillerÃa, es un organismo que depende mucho de la voluntad de sus integrantes. Nosotros instamos a que el Comité de Frontera haga más hincapié en este problema, porque está muy naturalizado y es claro que hay pasos irregulares por nuestra fronteraâ.
      âNo sabemos cuántos casos de trata hay. Es muy dificultoso acceder a datos. Hicimos un informe que está dentro de las actividades del proyecto, pero nos ha llevado un tiempo y cuesta conseguir la información, porque no está digitalizada. Es una gran dificultad; hemos pedido datos en GendarmerÃa, en la división de Trata de la PolicÃa de la Provincia, en el ministerio de Salud, en el INADI, y hemos tenido respuestas de algunas de ellas. INADI tiene información de los casos que reciben, también el ministerio de Salud en el departamento de Violencia Familiar. La policÃa nos ha dado un informe pero que hicieron a pedido nuestro. Por otro lado, GendarmerÃa no nos envió ninguna clase de información. En el caso de la Municipalidad de San Salvador de Jujuy, sà hubo eco del pedido y nos envió un informe. A partir de los datos obtenidos, en nuestro informe damos cuenta de que la trata existe y existe a nivel interno, es decir, no somos un paÃs de tránsito, sino de destino, más que nada, entre provincias. La zona que más personas provee es el Norte Grande, en el que está incluido Jujuy. El destino es el sur del paÃs, Santa Cruz, Chubut, La Pampa, Córdoba, Buenos Aires, Santa Fe. Todos los centros de mayor poder económicoâ.
      La metodologÃa de captación es un tema aparte. âTodo se hace desde el engañoâ, explica Ãlvarez Carreras. âLa situación de pobreza influye mucho, incluso, se hacen pedidos en avisos clasificados. Muchas veces se presentan con la fachada de que son familias, para convencer de que son de confianza; en otros casos establecen relaciones de noviazgo, son chicos de otros lados jóvenes, incluso algunos llegan a tener hijos y reconocerlos con las vÃctimas para que se puedan ir con ellos. Tienen arreglos con empresas de transportes, taxistas, choferes, que también detectan a las vÃctimas según las especificaciones la edad, caracterÃsticas fÃsicasâ.
      Respecto a si el decreto presidencial que prohÃbe la publicación de clasificados del rubro 59 ayudarÃa a prevenir la trata de personas, Ãlvarez Carreras expresó âeste decreto es una medida polÃtica importante, de alto impacto en la sociedad por lo que desnaturaliza, y ayuda deslegitimar la violencia simbólica hacia las mujeres. Los avisos que publicitan encuentros sexuales pueden estar encubriendo situaciones de explotación sexual y trata de personas, y prevenir eso es el objetivo del decreto, a la vez que cumple con la Ley 26485 de protección integral, teniendo en cuenta que la violencia simbólica tiene una modalidad mediática, ya que los avisos del rubro 59 o similares, aparecen en medios masivos de comunicaciónâ.
      Como todo la foto de la situación es más amplia. âSin embargo âcontinuó diciendo-, es necesario aclarar que este decreto no prohÃbe y ni criminaliza a personas particulares que ejercen la prostitución (trabajadoras sexuales autonómas) y es cierto que en algún punto podrÃa "perjudicarlas" por el hecho de no poder contar con difusión de su trabajo. Desde AMMAR (Asociación de Mujeres Meretrices de Argentina) reconocen la validez de la medida, identifican que podrÃa perjudicarlas en su trabajo, y solicitan además (como otras organizaciones del movimiento de mujeres) la modificación de la Ley de Trata, que permita perseguir de manera efectiva el delito sin revictimizar a las victimas, es decir, que se logre demostrar que fueron engañadas. Además, que se cuente con programas de protección de testigos para las trabajadoras que puedan y conozcan de actividades de trata y asà puedan denunciarlas, y con  programas integrales de rescate, protección y reinserción laboral de mujeres (y niños) rescatados de las redes de explotación sexual, y medidas que desalienten las prácticas prostituyentes. Sin cliente no hay trataâ.
      Finalmente, se refirió al consumo de la âmujer objetoâ. âEn Jujuy tenemos medios de comunicación impresos, donde se difunden imágenes de mujeres desnudas, y esto no contribuye a prevenir la trata. El INADI hizo alguna recomendación en relación a esto. La publicación de fotografÃas de mujeres desnudas no contribuye a que disminuya la violencia hacia las mujeres. Pero la sociedad también tiene que condenar estas cosasâ.
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