Comisión de los Bicentenarios
Un paÃs más integrado Entrevista a Liliana Fellner
âSiempre decimos que, si bien esta Comisión tiene una naturaleza conmemorativa, es decir que tiene un ojo puesto en el pasado, que podemos exaltar y revisar crÃticamente, tiene otro puesto en el futuroâ dijo la senadora Liliana Fellner en el contexto de una entrevista en la que dio precisiones sobre los objetivos de la Comisión Bicameral de los Bicentenarios, que preside, y que, en sus acciones iniciales prioriza la instalación de un debate sobre los años que vendrán en el paÃs.
-¿Qué hace hoy la Comisión Bicameral del Bicentenario?
-En primer lugar debo aclarar que la Comisión, que se ha creado por resolución de ambas Cámaras, se propone conmemorar dos Bicentenarios, es decir a aquél que se celebra en 2010 en torno al 25 de Mayo pero también al Bicentenario de la Declaración de la Independencia en 1916, por tanto esta comisión es de Los Bicentenarios.
-¿No se corre el riesgo de desdibujar las acciones, al tener un objetivo tan ambicioso como el de conmemorar dos fechas en vez de una?
-En absoluto, es más, creemos que habiéndolo diseñado de esta manera, y esto es algo que hemos defendido en el recinto, estamos abriendo la posibilidad de llevar a cabo un proceso de trabajo que no puede agotarse en una fecha celebratoria. La oportunidad de conmemorar los Bicentenarios abre una etapa de reflexión entre un proceso que se inició en el RÃo de la Plata, pero que culminó con la heroica decisión de un grupo de hombres de ser libres en el Congreso de Tucumán. Y esos 6 años que transcurrieron entre el 25 de Mayo de 1810 y el 9 de Julio de 1816, son una metáfora de las tensiones que perduran durante muchos años entre la ciudad puerto, Buenos Aires, y el interior del paÃs. Por eso los bicentenarios nos marcan el primer borrador de nuestra voluntad de independencia y de organización federal. En ese sentido, siempre decimos que, si bien esta comisión tiene una naturaleza conmemorativa, es decir que tiene un ojo puesto en el pasado, que podemos exaltar y revisar crÃticamente, tiene otro puesto en el futuro. Hablamos de los hechos fundacionales de nuestra patria y de cómo proyectamos un paÃs más integrado y auténticamente federal.
-Hay una gran cantidad de ámbitos institucionales que están desarrollando actividades y que tienen estructuras orgánicas destinadas a trabajar en torno al Bicentenario ¿cómo piensan ustedes diferenciarse o posicionarse ante tanta oferta sobre el mismo tema?
- Creo que la preocupación por diferenciarse no tiene razón de ser en si misma; quiero decir, no sirve de nada pensar en diferenciarnos por la diferencia en sÃ, el problema es tener en claro cuál es la razón de ser de esta Comisión como un ámbito institucional del Congreso de la Nación y creemos que, como poder del Estado, el Parlamento tiene un rol protagónico en la gran convocatoria nacional que se produce en torno al Bicentenario.
-¿Cuáles serÃan los ejes principales?
- Hay aspectos generales y otros especÃficos, que conforman nuestra propia agenda dentro del Bicentenario. En primer, lugar esta es, lo decimos permanentemente, la institución clave del sistema democrático en tanto asegura la representación plural y federal de todas las expresiones ratificadas por la voluntad popular; de ahà se desprende que nuestra impronta en el gran marco del Bicentenario tendrá, que ver con la afirmación de los valores democráticos, plurales y representativos del paÃs futuro. Si algo debemos superar de nuestra propia historia es el modo en el que se encaró el proceso de celebración del Centenario de la Revolución. En esa ocasión, un grupo consolidado de poder, aprovechó la ocasión para afirmar un modelo y no para convocar a un debate colectivo que permitiera la participación y garantizara la expresión de todos los intereses en juego. PodrÃamos decir que, celebrando la Revolución de Mayo, recordamos el reemplazo de la administración colonial por una nueva élite criolla y portuaria. Pero en 1816 es la ratificación de esa voluntad por parte de todas las provincias. En esta oportunidad, y creo que sin dudas hay un aprendizaje y un avance en eso, los festejos del Bicentenario constituyen una ocasión para generar un gran debate nacional y provincial acerca de lo que queremos para nuestro futuro. Y creo que no hace falta decir que el ámbito que por naturaleza y representación tiene como actividad central debatir ideas, es el Congreso. Creo que aquà reside la soberanÃa popular y federal, obligándonos a ser protagonistas centrales de esta gran dinámica bicentenaria.
-También hablaba de aspectos especÃficosâ¦
-Tenemos una agenda que se encuentra, como dicen algunas páginas web, âen construcciónâ, que estamos tomándonos el trabajo de construirla fundamentalmente por la vÃa del consenso, que creo es la metodologÃa ideal para definir las propuestas de la Comisión. Sin embargo, creo que hay algunas acciones que deberemos hacer casi obligadamente; por ejemplo: como la Biblioteca de Mayo es una obra importantÃsima que se editó en 1960 en ocasión de los ciento cincuenta años de la Revolución, tiene 23 tomos y compila todas las publicaciones producidas durante el perÃodo independentista, contiene información de la más variada y de una riqueza enorme no sólo para historiadores, sino para un público más amplio. Los derechos de esa publicación pertenecen Senado de la Nación. El Congreso tiene un compromiso ineludible con la reedición de esa obra. Existe un proyecto de la senadora Perceval en ese sentido, y si no me equivoco, la Biblioteca del Congreso también está llevando a cabo un proceso de digitalización de los volúmenes de la obra. Nosotros debemos apoyar toda iniciativa que se oriente a revalorizar y poner nuevamente en circulación esta obra extraordinaria, la ocasión es absolutamente pertinente. Desde ya que nuestra intención es avanzar con el proyecto de su edición impresa, pero también con su digitalización y puesta a disposición en la web, lo cual implicarÃa democratizar el acceso a un material valiosÃsimo de un modo inédito. Sin dudas debemos avanzar muy rápidamente también en la coordinación de proyectos con las comisiones del Bicentenario de las legislaturas provinciales que ya están formadas e impulsar la creación de aquellas que todavÃa no se hayan creado.
-¿Acciones conjuntas con el Poder Ejecutivo?
- Sin duda es una preocupación que tengo siempre, la de tratar de trabajar articuladamente, convocando ampliamente y en contacto con todas los actores institucionales que están involucrados en el mismo tema. Es una de las tareas que tenemos que sostener cuidadosamente, entre otras cosas, para evitar la repetición de experiencias y acciones. En ese sentido no sólo estamos realizando los contactos con el Poder Ejecutivo a través de la Comisión del Bicentenario que depende de la secretarÃa de Cultura, también estamos iniciando los contactos con organizaciones no gubernamentales, movimientos sociales, organizaciones gremiales y otros actores. Le dirÃa que uno de los desafÃos que tenemos por delante es desarrollar un buen sistema de comunicación e interacción con todos aquellos que se encuentran realizando tareas en torno a la evocación y vigencia del proceso emancipatorio hispanoamericano. Inclusive en términos regionales, sobre todo teniendo en cuenta que Latinoamérica asistirá a la celebración, en un mismo perÃodo, de las tres grandes corrientes independentistas que se irradiaron por todo el continente. Desde el âgrito de Doloresâ en México, pasando por la Nueva Granada de la empresa bolivariana, hasta el RÃo de la Plata desde donde Belgrano y San MartÃn extenderán su acción al Alto Perú y al otro lado de los Andes. Y esa también es un área de acción que tenemos que desarrollar ya que esta etapa de celebración y reflexión en torno a una fecha histórica de tal significación, también tiene una fortÃsima dimensión latinoamericana, y tenemos que ser lo suficientemente ágiles para enriquecernos con todas las experiencias que se estén produciendo en esas  naciones hermanas.
-Una agenda amplia y ambiciosa.
-Amplia sin duda lo es. Lo de ambiciosa... yo creo que el desafÃo es estar a la altura de las circunstancias, con objetivos muy relevantes y significativos. Ahora, nosotros además de tener una comprensión responsable y abarcadora de las cosas que están en juego en este proceso, debemos ser creativos, capaces de actualizar temas que desde hace mucho tiempo vienen debatiéndose. Tengo la impresión de que en estos últimos meses, en el marco de polémicas sectoriales y muchas veces facciosa en que el debate derivó, se ha encubierto la verdadera trama de lo que estaba en juego: de dónde venimos y adónde vamos; lo que un historiador norteamericano ha llamado las âficciones orientadorasâ, es decir aquellas ideas y modelos que diferentes sectores tienen de lo que se supone que debemos ser, me parece interesante esta forma alternativa de presentar la cuestión acerca del debate sobre el paÃs que queremos, en todo caso existen distintas ficciones, relatos posibles acerca de nuestro porvenir, creo que es de una responsabilidad enorme saber canalizar esas manifestaciones, saber darles un espacio, promover la ampliación de los interlocutores, poder asegurar vÃas de expresión y garantizar la visibilidad de esas experiencias.
Ep. FELLNER.
Llam.: âUno de los desafÃos que tenemos por delante es desarrollar un buen sistema de comunicación e interacción con todos aquellos que se encuentran realizando tareas en torno a la evocación y vigencia del proceso emancipatorio hispanoamericano.â