El 30 de octubre, periodistas de distintos medios jujeños salimos a las 7 de la mañana de San Salvador para cubrir las actividades que se iban a realizar en el Paso de Jama, frontera con Chile, en el marco de la firma en ese país de un Tratado de Integración y Cooperación con las presidentas Michelle Bachelet y Cristina Fernández; paralelamente en otros pasos biocéanicos se daban actos similares (incluso a la misma hora). Entre otras cuestiones, en protocolos adjuntos al Tratado se abordaban dos iniciativas de integración: el Ferrocarril Trasandino Central, que permitirá a nuestro país acercarse a los mercados de la  Cuenca del Pacífico a través de los puertos chilenos y el túnel de Agua Negra,  para proyectar el núcleo productivo del Mercosur al Pacífico.
      A medida que íbamos subiendo hacia la Puna y nos maravillábamos con los paisajes, mate de por medio, íbamos sintiendo en cada sitio las dificultades de la vida en estos lugares alejados de Jujuy.       Después de Purmamarca la señal de los celulares murió para resucitar por poquísimos minutos mientras pasábamos por Susques y la volvíamos a perder en la inmensidad. Llegar al punto de encuentro fue emocionante. Allí había, oasis en el desierto, una gran cantidad de gente, argentinos y chilenos, rebosantes de alegría, saludándose y conversando como viejos amigos que son quienes pelearon por el Paso de Jama y comparten la alegría de haberlo logrado y aquellos que se fueron sumando a esa pelea. A lo largo del día se repitió una crítica, por los menos entre los periodistas jujeños: la ausencia de autoridades de peso de la provincia de Jujuy en representación del gobierno.
      En el comité de bienvenida, en el edificio que comparten aún Aduana y Gendarmería, frente al flamante Complejo del Paso de Jama, a más de 4200 metros de altura, también estaban los alumnos de la Escuela Nº 454 “Ramón Gumersindo Acosta”, “de punta en blanco” para participar del acto.

El evento
      Las palabras iniciales en el acto le correspondieron al intendente subrogante de Antofagasta, Jorge Arangua Costa, quien expresó “Esta actividad que hoy nos convoca en el límite fronterizo de nuestros países quedará guardada en la historia  que compartimos, la cual tiene denominadores comunes y está estrechamente ligada en el desarrollo y evolución de nuestros pueblos y su  idiosincrasia, su presente y su futuro. En este mismo momento nuestra presidenta está suscribiendo en la comuna Maipú de Santiago de Chile un tratado de integración y cooperación entre Argentina y Chile de una envergadura enorme, que abarca desde el aspecto económico la seguridad social, la educación, la cultura y el ámbito de las ciencia y la tecnología, las fuerzas armadas conjuntas para la paz,  la libre circulación placentera  y proyectos extraordinarios de conectividad, una experiencia inédita en América que fortalece además la vocación de integración que tenemos ambos países  en esta extensa frontera de paz que compartimos”.
      Destacó el valor del trabajo en conjunto entre los dos países y no dejó de mencionar –aunque al pasar- algunas barreras que pueden impedirlo:  “la integración que estamos llevando a cabo es un camino sin retorno que beneficiará a cada habitante, que fortalecerá este sentimiento de hermandad  entre quienes sentimos que la frontera  no es un impedimento para crecer juntos,  para complementarnos, para desarrollar equitativamente nuestras regiones y para acercarnos aun mas a quienes somos hermanos de historia  y sentimientos. (…) A partir de ahora tenemos un gran desafío hacia delante que habla de hacer operativo este Tratado de Integración y Cooperación del cual ya tenemos grandes avances a la fecha, una agenda común de trabajo y logros que solidifican el camino que nos hemos trazado, por lo tanto el horizonte está despejado  y de nosotros depende que este compromiso bilateral  tenga la trascendencia que estamos proclamando y que logre romper las barreras que aun existen, impulsando el intercambio comercial, incentivando de manera concreta los emprendimientos en ambas fronteras, nos permita convertirnos en una alternativa generadora de ofertas y demandas que nuestros pueblos requieren, seremos testigos de cómo nuestras universidades crean intereses académicos comunes, veremos como el desarrollo económico y la innovación cobran sentido mutuo, veremos como fortalecemos y aunamos esfuerzo para que nuestra gente tenga más y mejor protección social para superar sus vulnerabilidades, rompiendo así las brechas que existen entre quienes están insertos en el mundo del desarrollo y quienes requieren de nuestro apoyo para ser parte de esta dinámica”.
      Por parte de Jujuy, Gustavo Ortiz, secretario de Integración Regional y Desarrollo PYME del ministerio de la Producción, también habló de la importancia del acto realizado en el Paso de Jama, destacando “la esencia tan importante que tiene este acto es que hace 191 años José de San Martín y Bernardo O´Higgins se estrechaban en un abrazo de integración y hermandad con Chile, y creo que es esto lo que hoy están  reforzando la presidente Cristina Fernández de Kirchner y la presidenta Michelle Bachelet”.  
      Respecto a las tareas que quedan por delante aún, expresó “hay que seguir trabajando por ese horizonte que imaginaron los pioneros, una travesía por Jama para lograr intercambiar productos y también resolver necesidades como alimentación y salud. Hoy es un hecho concreto con beneficios para ambas regiones. Ahora hay que empezar a tratar la cuestión productiva y lograr el valor agregado de nuestra producción en Chile y hacer uso del Tratado de Libre Comercio para la búsqueda de nuevos mercados”. Y agregó “Hay diversas problemáticas, por un lado el tema del transporte, el turismo y otros, en particular los que hacen a cuestiones migratorias. Sin embargo, lo principal es no perder el horizonte y hacer de este complejo una posibilidad de resolver lo que se presente y  pensar en seguir cambiando”.
      En la comitiva, además de funcionarios, pioneros e hinchas del Paso de Jama y periodistas, había empresarios. Constantino Zafiropulos, presidente internacional del Grupo Empresario Interregional del Centro Oeste Sudamericano (GEICOS), al hablar acerca de lo que implica Jama, dijo “Acá hubo próceres que hicieron el camino a pico y pala, por ejemplo, el ex intendente César Castillo, que también fue un hombre que estuvo con picota en mano”. Acerca de lo que falta por hacer todavía y las indefiniciones desde Chile respecto de la utilización en conjunto del Complejo Paso de Jama, como control de cabecera única, teniendo en cuenta que dejar el control en San Pedro de Atacama implicaría dificultades en cuanto a la misma vida esa localidad y el control efectivo de otros pasos en Chile, expresó “Hoy tenemos un camino maravilloso, lo que nos está faltando es un control integrado de cabecera única; esto es lo principal. Las instalaciones aquí son hermosas, entonces ¿para qué Chile va a hacer tremendo gasto? No es necesario que Chile construya otro control, que implicaría una inversión de alrededor de cien millones de dólares, teniendo ustedes este complejo que parece un hotel cinco estrellas con excelentes instalaciones. Pienso que la confianza con los pueblos hoy día han dado las condiciones para poder tener un complejo integrado aquí en Jama. Este debe ser de cabecera única y es lo que nosotros como empresarios pretendemos”. Además, se refirió a la necesidad de agilizar los trámites en las aduanas: “Hoy el sistema de transporte no puede perder tiempo en la Aduana. Como GEICOS es un planteamiento que hicimos en el foro de gobernadores, porque hay que sacarse de la cabeza la “facilitación fronteriza”, es una falsedad absoluta, en la frontera al empresario no se le facilita nada. Tenemos que hablar de agilización fronteriza, que la revisión de los vehículos sea rápida por una razón sencilla los barcos en el puerto no esperan. No podemos tener detenido un vehiculo cuatro cinco seis días en las aduanas porque le faltó un papel, el chofer del camión tiene una gran responsabilidad, conducir el camión que vale 100 mil dólares, pero aparte de esto pretenden que sea casi un secretario bilingüe, que maneje notebook. Hay que desburocratizar la Aduana. Un complejo como este del Paso de Jama, permite tener un control aduanero, de migraciones, muy completo y que permite agilizar los controles”.
      Más adelante, también habló sobre el trabajo que realizan ambos países en cuanto a integración y evaluó “Han puesto bastante de su parte, si bien es cierto que ha habido demoras grandes, hay que ver los buenos resultados. Hay que ver el presente y afrontar el futuro, Argentina y Chile han puesto bastante en esta apuesta porque las nueve provincias tanto del NOA y el NEA  junto  al Macro Norte (desde la primera a la tercera región chilena) están unidas, y el compromiso no sólo es de los gobiernos, sino también del empresariado, y todo esto ha permitido llegar hasta acá; es lo que cuenta y lo que vale”.
      Finalmente, acerca de las dificultades que todavía hay que superar, explicó “Hay, por supuesto, problemas propios de cada país que no vamos a resolver nosotros; hay también un problema de idiosincrasia: nosotros no pensamos igual que los argentinos ni ustedes como nosotros. Pero lo principal es tener ganas de hacer las cosas y sentarse a dialogar, esto es quizás lo que nos ha demorado incluso dentro de Chile mismo. Nuestros tiempos, nuestra manera de pensar es distinta, pero lo importante es que tenemos el convencimiento de que hay que hacer una integración”.   

Vivir en Jama
      Entre tantas palabras elogiosas por las instalaciones del Complejo, por las acciones llevadas a cabo por los gobiernos y las personas, los buenos deseos y la necesidad de que se cumplan y la alegría de los reencuentros, se me planteaba la necesidad de poder saber cómo es la vida en Jama, los 365 días del año, cuando no hay grandes acontecimientos ni palabras rimbombantes. Al hablar con algunos gendarmes era claro que muchos no tenían demasiado contacto con la gente del lugar; ni siquiera pudieron decir cuánta gente habitaba Jama, tal vez por el tipo de esquema de trabajo que tienen, 30 días en Jama y 5 días de franco. En cambio, Zulema Toconás, que trabaja realizando el control de la obra del Complejo, y que pasa muchos días de su vida allí, contó “Se está constituyendo un pueblo, viven acá alrededor de treinta familias, muchas de ellas provenientes de pueblos cercanos como El Toro, Susques y Catua; la instalación de este complejo genera mucha expectativa en la gente”. Y agregó “Vivir aquí es muy difícil e inhóspito sobre todo lo que preocupa es el tema de la comunicación y el transporte, no hay señal para celular ni Internet tampoco colectivo. Por ejemplo el colectivo que va a Chile desde Jujuy ni siquiera tiene parada en Susques, así que por más que uno quiera venir hacia Jama desde Jujuy, llegás a Susques y no tenés comunicación alguna, excepto algún vecino o particular. En mi caso, puedo hacer las inspecciones porque la empresa constructora tiene la obligación de ponerme transporte”.
      La distancia y las dificultades para sortearla, plantean varios inconvenientes, por ejemplo la provisión de alimentos. “La variedad de comida es ínfima –comenta Zulema Toconás- además, es carísimo traer productos y aprovisionarse. Es más común el intercambio con Chile, tipo mancafiesta, un trueque de productos”. 
      Hay muchísimos niños en Jama, casi más que adultos. La mayoría ayuda a su familia con las tareas del campo, saben hacer hilados, cuidar rebaños. En general lo hacen durante el fin de semana, ya que la escuela es albergue y se vuelven a sus casas los viernes. Las familias tienen algunos animales, y en muchos de los casos los hombres trabajan en las minas, en la extracción de litio y bórax. Sobre los niños y sus duras existencias, hablamos –ya en le viaje de vuelta- con Angélica Ramos, docente de plurigrado en la Escuela Nº 454 “Ramón Gumersindo Acosta”. Con 41 alumnos y dos maestras, la escuela tiene dificultades edilicias, a lo que se agrega la modalidad de plurigrado, que implica, por ejemplo, que esta docente se ocupe de los alumnos de Jardín de Infantes y de los de 2º y 3º grado en un mismo momento y espacio, mientras que otra docente, trabaja con 4º, 5º, 6º  y 7º grado. Esperan algunas cosas: la designación de una maestra de Jardín y un nuevo edificio, “una escuela móvil” aparentemente construida en módulos tipo contenedor. Otras, comentó, mejoraron, por ejemplo, el hecho de que los viernes llegue un agente sanitario desde Susques y una vez al mes, un dentista. Al terminar la escuela primaria, muchos niños y sus familias deciden que continúen estudiando, sin embargo, no lo pueden hacer allí. “Se van a la escuela secundaria de Susques o a la de Abra Pampa; otros padres prefieren que vayan a San Salvador, porque no les gusta “el nivel” –y así lo expresan- de la escuela de Susques. Por ejemplo, este año hay dos niñas que se van a estudiar a Jujuy, a un internado. Hay unos 28 chicos que quieren seguir estudiando”. Y por eso, vienen solicitando una escuela secundaria en Jama que pueda contener esta demanda, teniendo en cuenta además, el interés que tiene el hecho de la puesta en marcha del Complejo y algunos necesidades que ya se ven. Piden una escuela que ofrezca tecnicatura en relación al trabajo aduanero o con una orientación en mecánica, que siendo una zona de frontera, tiene demanda al respecto.

El edificio
      La construcción del Complejo Paso de Jama es muy bella y tiene algunas características que merecen un capítulo aparte. Ariel Sánchez, ingeniero civil de la Dirección de Arquitectura de Jujuy, es inspector de la obra. “Estamos en un 98% de terminación de obra en cuanto a la parte edilicia, básicamente faltan algunas conexiones de gas y algo de electricidad; después restan ya arreglos del interior, retoques de pintura y jardinería. Se realizó con fondos nacionales relativos –explicó- porque el monto de obra está financiado por Nación  pero de la readecuación de precios se hizo cargo la provincia, que en este momento está esperando recuperar esas cifras de readecuación”.
      En cuanto a las características edilicias, comentó “Son 1800 metros cuadrados aproximadamente. Consta de dos edificios el que da al norte para el control de pasajeros y el del lado sur, para camiones. Otro es el edifico de vivienda para el personal de Gendarmería, Migraciones, Aduana y SENASa. Toda la obra se construyó con materiales de la zona cuidando que arquitectónicamente el edifico tenga el mismo lenguaje del paisaje. Por ejemplo, algo que se destaca es que respondiendo a la amplitud térmica de la zona, los edificios que tienen su frente al norte están vidriados sobre el muro, técnica denominada muro trombe, una combinación de vidrio, piedra, ladrillo y aire. Los otros frentes del lado sur, este y oeste tiene este sistema pero con una aislamiento térmico en el medio. Además, tienen una calefacción natural que retiene el calor  y que esá reforzada a su vez con un sistema de calefacción en base a agua caliente en circuito cerrado. Otra característica es el  techo con chapa doble y aislamiento térmico en el medio y adentro cielorraso. Quisimos también asegurar la estabilidad ya que el viento acá alcanza los 120 kilómetros por hora”. 

Controles en la frontera
      El tema de los controles que se hacen en la frontera es complejo y crucial en cualquier paso fronterizo, el Paso de Jama comenzó a trabajar como tal en diciembre de 1991. Acerca de las características de las tareas que realizan Javier Bach, administrador de la Aduana Jujuy, explicó “Desde 1991 ha tenido un crecimiento exponencial  en cuanto al volumen operativo, sobre todo en los últimos años a partir de la inauguración de la cinta asfáltica completa (2005). Hablamos de más de 150 vehículos diarios, con un promedio de más de 50 mil vehículos en el 2008 y más de 200 mil personas. Por eso, es el segundo corredor bioceánico después de Mendoza. No solamente une Argentina y Chile sino que también los puertos de Brasil y Uruguay, desde Paraguay desde Bolivia con Chile con Perú y con Ecuador. Lo que aún no se ha identificado son embarques significativos hacia Asia pero es a lo que se apuesta a futuro”. Además, continuó diciendo “este complejo fue diseñado hace más de diez años pensando ya en una aduana de cabecera única integrada con la contraparte chilena. Hasta el momento eso no se ha concretado pero imaginamos que a partir de esta inauguración se van a precipitar los hechos. Además, de una vocación integradora  tiene que ver con la necesidad de brindar al usuario de la frontera un mejor servicio pensando también en quienes trabajan acá en condiciones extremas.
      Esto es un sueño de muchos pioneros de Argentina y Chile, Froilán Cabezas, el Toto Gronda, Oscar de Oliveira, Vicente Cicarelli, es algo que nos tiene que llenar de orgullo y no solo significa una atención más ágil sino también más segura en la frontera con tecnología necesaria como el scanner de valija incorporado a través de la AFIP”.
      En cuanto al personal necesario y la modalidad de trabajo, Bach comentó “Se realizarán turnos semanales rotativos de 12 personas, de esta manera se busca garantizar un estándar de atención que no supere la hora, teniendo también en cuenta el tema de la altura y las condiciones adversas. Se busca  excelencia de servicio y buenas condiciones de trabajo para el personal. Vienen hasta aquí en un transporte que provee la Aduana todas las semanas; los turnos son rotativos, y si es necesario llegado el momento se pedirán refuerzo de otras regiones como la aduana de Salta, de quien dependemos. Además, funciona como apoyo estratégico de este paso de frontera está la Zona Aduanera Primaria de Palpalá, otro hito en la región y una verdadera plataforma de oportunidades para el comercio exterior para diferentes empresas, 12 provincias argentinas entre ellas Jujuy con mas de 50 empresas consolidan sus embarques de exportación o importación en la zona primaria aduanera Palpalá. Por otro lado, muchos embarques considerados “de riesgo” que puedan ingresar por el Paso de Jama son verificados en Palpalá en condiciones excelentes, donde hay escáner móvil, báscula y dársena para el manipuleo de la mercadería. En fin, se busca garantizar el control con métodos no intrusivos y ágiles”.  
      Otros aspectos del control en la frontera lo constituyen Migraciones y el SENASA.  Primero se realiza el control migratorio y luego el de aduanas y SENASA. Respecto a la modalidad de trabajo, el director de Migraciones de Jujuy, Javier Hinojo, detalló “se pide la documentación necesaria y se cargan los datos en el sistema integrado a nivel nacional (SICAM) donde sale todo el historial migratorio de la persona, si tiene algún tipo de medida judicial se ve en el sistema, si se trata de un caso positivo se le da vista al juez y se trabaja en forma conjunta con gendarmería  y policía auxiliar migratoria”. Respecto a la cantidad de personas que trabajan en Jama, comentó “Comenzamos con dos, ahora debido al aumento del flujo de personas y de transporte, se amplió. Hay que recordar que hay cinco empresas que están pasando a diario, que van a Perú y Chile, y se hizo necesario más personal, sobre todo para el horario pico entre las once de la mañana y las cuatro de la tarde. Cuando comience a funcional el Complejo, tenemos pensado llegar hasta doce personas en la atención”. Sobre las diferencias del control que se realiza en la frontera con Bolivia, explicó “en Bolivia el paso vecinal fronterizo tiene una legislación particular y el flujo de gente es totalmente distinto. El de Susques es un control fronterizo en el sentido literal de la palabra; en Bolivia se hace lo que se puede, acá se actúa conjuntamente con las autoridades chilenas y se intensifican los controles a lo largo de la ruta. No tenemos otra alternativa ya que tenemos 130 kilómetros de frontera con un solo puesto de control  habilitado”.
      La otra pata del control en Jama es el SENASA, que de acuerdo a su director regional, Jorge Cabral, prevé trabajar “como lo venimos haciendo en los puestos fronterizos de Salta y Jujuy, por ejemplo La Quiaca, Aguas Blancas y el único que tenemos con Paraguay en Misión La Paz. Contamos con las herramientas necesarias y la coordinación para trabajar en conjunto con Gendarmería y Migraciones”.
      Respecto al tipo de controles que realizan, explicó “Fundamentalmente los camiones que llevan productos agropecuarios y alimentos, en cuanto a las personas se hace control de equipaje del acompañante. Lo que tratamos es mantener el status sanitario de nuestro país impidiendo que entre algún agente, alguna plaga. Y lo hacemos con dos agentes en Susques y un supervisor. Sin embargo, la idea es tener alrededor de doce agentes en Jama con un sistema de rotación”. 

      El Complejo del Paso de Jama está casi listo, las planificaciones parecen acompañar el ritmo del flujo de vehículos, gente y productos. El proyecto, a punto de comenzar una nueva etapa, sigue avivando la llama de la integración y la amistad a los dos lados de la Cordillera, bajo el brillante cielo de la Puna.