Aunque el encuentro en la radio era para analizar la violencia que puso a San Pedro en los titulares de los medios nacionales, esta entrevista con el diputado Esteban Fado Zamar (llegó a la Legislatura integrando la lista del Frente Jujeño, en cuyo Bloque revista) terminó sirviendo también para mostrar el rostro de un nuevo estilo de hacer política, que tiene mucho más de sentimental que de estrictamente político. Líder del Partido Popular Sampedreño que salió al ruedo después de la crisis del 2000-2001, Zamar y su gente quizás sean lo único que quedó en limpio después del “que se vayan todos”. Nutrida con dirigentes y ciudadanos comunes de distintos partidos, la agrupación no tiene ningún problema en poner en segundo lugar las ideologías para tomar como eje vertebrador la simple consigna del amor a Jujuy, proponiendo -dicen- una alternativa a los modelos agotados de las organizaciones tradicionales.

      â€œLa crisis del 2000 no ha sido superada en el país y mucho menos en San Pedro”con estas palabras, Zamar respondió a la pregunta que se hacen muchos en Jujuy: cómo es posible que los sampedreños sigan votando a un dirigente como Julio Moisés que hace del conflicto una diaria manera de hacer política y que las alternativas que se produjeron a lo largo del tiempo fracasaron en todos los casos. “Algo está mal en la administración municipal, la ciudad vive de crisis en crisis; se trabaja atacando a todas las instituciones, no hay un diálogo serio desde el que se pueda para trabajar por la reconstrucción de la ciudad. Tengo esperanzas de que el gobierno provincial trabaje fuertemente en la contención de los funcionarios del municipio, que lleven solución a los problemas puntuales porque no es un problema de la ciudad sino de la Municipalidad con los gremios. Se pretendió involucrar a toda la comunidad  y es injusto por que somos gente de paz”.
      Tras resaltar que “estamos en contra de todas las violencias”, el diputado hizo una inquietante pintura de lo que sucede con la gestión de Julio Moisés: “desde el municipio se descalifica al resto de la comunidad, como si fueran los dueños de la verdad”. “Si se hace un análisis de la última elección, se ve que los votos negativos son los que ganaron; la sumatoria de la oposición es mayoría en San Pedro, Moisés no fue votado por una mayoría. De los 9 mil votos que sacó hay 6 o 7 mil estructurales, los de los que están y viven de la política”, explicó.

-¿Y por qué la gente no votó más al Frente Jujeño?
-Es el gran desafío. Nos presentamos en el 2003, con el Partido Popular Sampedreño, con la misión de presentar una alternativa diferente a la comunidad y prácticamente sin nada nos fue muy bien, si no ganamos, le pegamos en el palo. Elección que se repitió en el 2005; hay que recordar que fue  legislativa y el PJ instaló la idea que se votaba a Kirchner y a Fellner que no eran candidatos; no fue fácil y hay que señalar que hay quienes están muy bien preparados para manejos electorales y muy poco para las políticas de Estado, que es lo que está pasando en San Pedro.

-¿Cómo se inserta Zamar en la Legislatura y en el Frente Jujeño, que es tan heterogéneo?
-Me siento muy cómodo. También tengo que decir las razones que me llevaron a la política. Como mucha gente que ama a Jujuy y que ha trabajado en instituciones intermedias, pusimos grandes esfuerzos en nuestra vida particular y hemos visto que teniendo un país y una provincia tan ricos como los que tenemos, hemos estado pidiendo comida al mundo en el año 2000; la partida de los hijos buscando horizontes cuando no hace mucho llegaron nuestros abuelos para hacer una nueva vida. El examen hoy pasa por sumarse hombres y mujeres que tengan ganas de sacar adelante la provincia. Antes, desde el otro lado, he criticado mucho el mundo de la política y ahora, sin comprender todavía el por qué de algunas cosas, sé que hay que promover la participación activa de la ciudadanía; animar a que se sumen a la política, porque cambió rotundamente el eje en el cual se apoya la economía del país. Hasta hace 30 años, dependíamos exclusivamente del sector agropecuario y desde hace 20, con una economía prácticamente estatal, mientras se trabaja día y noche, el Estado genera reglas de juego que muchas veces no coinciden con las necesidades reales. Por ahí los hombres y las mujeres de Jujuy tenemos que ser capaces de dejar nuestros gustos políticos, las banderas originales, para ponernos a trabajar por nuestro país”.

 -¿Por qué el Frente Jujeño?
-Porque creo que el senador Gerardo Morales es uno de los pocos hombres dedicados al mundo de la política con pasión por Jujuy, con ideas de las más limpias, en el sentido de decir que ama lo que hace. Esa manera de vivir y sentir Jujuy le está costando un gran sufrimiento dentro de la UCR. No hemos visto eso en muchos de los otros hombres que son dirigentes o conductores partidarios.