Municipalidad de Jujuy Jujuy en L�nea Diario Jujuy
San Salvador de Jujuy - ARGENTINA /

Hotel Gregorio
Finca La Colorada

Hotel Gregorio

 

 

Entrevista a Patricia Cardozo

Embarazo adolescente

      Patricia Cardozo es docente de Educación Física del Bachillerato Provincial Nº6, del Barrio Islas Malvinas. Desde hace cinco años trabaja en esa institución educando, apoyando y conteniendo a adolescentes embarazadas que concurren a la escuela. La sanción social, la exclusión, el desconocimiento, las dificultades socioeconómicas, el respeto, la responsabilidad, desde la visión de una docente que se compromete con la vida.

 

-¿Cómo empezaste con este trabajo y cómo es actualmente?
-Empecé sola, sin un equipo docente, cinco años atrás, siempre en mis horas de clases trabajé con las embarazadas específicamente para el parto. Ahora hay un equipo docente que me está apoyando desde este año porque se implementó en la escuela un proyecto nacional de prevención del SIDA y en ese marco mi tarea se ponderó y se sumó. El trabajo se hace a contraturno, con las embarazadas de todos los años, y con el apoyo de la profesora de Biología, en esto pongo horas de mi tiempo particular por la seriedad del tema.

-¿Cuáles son las condiciones para que esta actividad se realice?
-En el ámbito escolar las estructuras están dadas para que uno organice este tipo de trabajo.

-¿El ámbito escolar de toda escuela?
-De mi escuela, porque me lo permite el directivo, el asesor pedagógico, siempre y cuando yo fundamente lo que se hace, por qué y para qué.

-¿Por qué empezaste a trabajar con las adolescentes embarazadas y con la prevención del SIDA después?
-En primer lugar empecé a ver la realidad de mi escuela, no quiero decir alarmante, sino que me impactaba ver adolescentes de 14 años en adelante, varias (este año han llegado a ser 15 en los dos turnos de la escuela). Me especialicé en el trabajo con embarazadas en el ámbito privado y ese saber lo llevé a la escuela. Mis compañeras de Educación Física me mandaban sus alumnas embarazadas para trabajar porque les era dificultoso organizarse para darles trabajo especial. En realidad si buscamos, si escarbamos en los propios contenidos, en el rol de cada uno, de todos los docentes hay mucho que desde la escuela se puede hacer por las adolescentes embarazadas, desde la parte de la comunicación de su embarazo a la familia, que es un aspecto muy dificultoso. Una de las metas de la formación de la Escuela Media es preparar a los chicos para la vida diaria y qué mejor que hacer un abordaje sobre esta realidad. Históricamente comencé con un espacio que abría la escuela que se llamaba Feria de la Provincia, donde yo exponía con un grupo de alumnos todo lo referido a embarazo, parto. Nos visitaban en esa feria todas las escuelas primarias y secundarias que pertenecían a la comunidad. Después comencé a trabajar específicamente en las horas de clase, porque se daba la situación de que otros docentes cedían sus alumnas para que participen. Por tener ese conocimiento específico, les daba información, la parte de trabajo físico la adaptaba –los ejercicios- y aprendía la que estaba embarazada y la que no. La adolescente embarazada específicamente, y la mujer embarazada en general, necesitan una educación personalizada, un abordaje directo. Se lo puede hacer pero cuesta mucho trabajar con ellas en grupo.

-¿Qué pasa con esta misma situación en otras escuelas, se hace algo parecido?
-Sé que no se da nada específico, es como que los contenidos no se adecuan a esa realidad. Si la adolescente va a Primer Año, en Biología va a seguir estudiando lo que le corresponde a ese curso y no se adaptan los contenidos. En Educación Física en general, hablo de esto porque la materia tiene mucho que ver con esto y tiene un compromiso porque la adolescente en esta etapa vive un cambio corporal y necesita una nueva percepción de su estado y una aceptación corporal, que es muy importante trabajar.

-Son muchos cambios de todo tipo.
-Que tiene que conocer y la escuela da esos conocimientos, pero hace falta que estén direccionados, canalizados hacia esta realidad. Es importante tener en cuenta que en mi escuela yo he podido trabajar en esto porque se ha reconocido la existencia de que hay mujeres adolescente embarazadas.

-Siempre fue una problemática fuerte.
-Se la reconoce y preocupa porque en general las chicas dejan de estudiar después de un tiempo. Muchas veces vuelven a retomar después del nacimiento, pero les cuesta mucho. El contexto social en que se inserta la escuela es de una gran problemática social.

-¿Cómo ves los vínculos de estas chicas embarazadas hacia adentro y hacia afuera de la escuela, familia, amigos?
-Hablando en rasgos generales, hay que partir de que se percibe una condena social. En la casa se les da muchas responsabilidades de golpe, se las carga con muchas presiones.

-¿Es una cosa muy fuerte y evidente esto de la condena social?
-Sí, estamos hablando de que cuesta que sean aceptadas. No es lo mismo que yo cuente en una reunión sobre la experiencia de trabajo con adolescentes embarazadas o que explique que en la primaria estamos dando a los chicos la copa de leche. No tiene la misma aceptación, tiene muchos cuestionamientos y por eso no recibe ayuda. Hay un castigo al placer, que en última instancia si hubiera una educación sexual adecuada, no se tomaría así.

-¿A vos te cuestionan?, evidentemente no en tu ámbito laboral
-En ámbitos ajenos a lo escolar, en reuniones sociales,  percibo esto de la condena social.

-¿Para vos a qué apunta la condena social?
-No se acepta la iniciación sexual temprana, no se entiende. La gente se olvida de sus propias historias y experiencias. Convengamos que hay un principio en educación que debe ser permanente, no todos la recibimos y nos olvidamos de nuestras propias experiencias y no las podemos transmitir a los que vienen. Y así pasa en las familias que no tienen la educación necesaria para transmitir a esa adolescente. Hay una falta total de educación sexual desde la familia, de cuestiones básicas. Por ejemplo, si vamos y preguntamos en nuestras casas la fecha de la menarca de las mujeres, seguramente ni siquiera recordamos la nuestra y esto es educación sexual. Cuando la mujer está embarazada debe saber cómo es la evolución, el desarrollo de ese proceso, esto es educación sexual. En un primer momento lo tiene que abordar la familia.

-Y a la escuela le cuesta retomar este camino, que la familia no abre.
-En la escuela recién estamos hablando de educación sexual. Y está muy cuestionado. Sí tengo que decir que debe ser abordado por personas que estén preparadas, formadas, para hacerlo. No cualquiera puede. Tal vez en este tema del embarazo adolescente también juegue la cuestión del deber ser, ese sello que llevan los docentes. Tal vez el docente piensa muy bien qué va a hacer al respecto, lo repiensa y decide no hacer nada.

-¿Cómo ves la situación de estas adolescentes?
-Al trabajar de manera específica, se tiene más conciencia de las realidades con las que vive esta adolescente embarazada: su relación familiar, social. Muchas trabajan y estudian. Trabajan en negro, viven con sus padres.
Este tipo de trabajo desde la escuela la puede contener para ayudarla a ser más responsable frente a su embarazo. Así se evitarían los abortos, que en su mayoría son clandestinos.

-¿Llevan una estadística de los embarazos, los abortos, las chicas que retoman la escuela, etc.?
- Se sabe. Sobre todo lo registra el preceptor. El docente que tiene interés en la alumna se entera, tiene esos datos.

-¿Se habla sobre el aborto, hablás del aborto?
-Sí. Es un tema que se trata porque los espacios específicos de trabajo promueven el tratamiento de diversos aspectos de la problemática. Y este tipo de espacios es muy importante porque te das cuenta cómo son asistidas, atendidas, en las salitas. Ellas sienten la culpa del embarazo y  muchas veces carecen de las herramientas más básicas de la comunicación, que se las da la escuela pero no orientada hacia lo que ellas necesitan. Al no tener esa herramienta orientada hacia esta situación específica más el bloqueo emocional que muchas tienen, no se comunican bien con el médico, no saben cuándo tienen turno, cómo se llama el profesional...Hay casos de chicas que fueron vacunadas dos veces.
Si está escolarizada convengamos que tiene que tener mínimamente esa orientación y guía desde la escuela, cada profesor desde su rol puede contribuir a esto y no le insume más trabajo. Cada uno puede aportar desde su lugar, por ejemplo, el docente de Lengua le puede ayudar a formular preguntas para que le haga al médico. De todas maneras, es fundamental que lo que ellas reciban les ayuda a aceptarse y ser aceptadas. Hasta que la familia se entera de que está embarazada pasan muchos meses, y no se los dice porque no sabe cómo hacerlo, y mientras tanto trata de lidiar con la condena social, con la culpa. Y no disfruta, prácticamente, de la mitad de su embarazo, lo que es fundamental para tener una maternidad responsable y plena.

-¿Cómo se trabaja desde la escuela?
-Se trabaja en educación sexual desde primer año. Yo me incorporé después del inicio, pero puedo decir que se realizó un diagnóstico a partir del cual se evaluó la necesidad de los chicos de tratar este tema: algunos se iban del aula, otros estaban interesados, otros no sabían. Los chicos traen muchas cosas: tabúes, conocimientos y mitos. De ahí la importancia de que esto se trate en la escuela, hay muchos conocimientos nocivos, distorsionados. Es un proceso para el cual la escuela tiene herramientas, sabe llevarlo a cabo. A partir del diagnóstico se diagramó un plan de implementación gradual, con talleres de educación sexual para todos. Se hace un abordaje de acuerdo a las edades y los intereses.

-¿Qué pasa si un chico te dice yo no quiero ir al taller?
-Asiste igual, porque el proceso se adecuó para que nadie se quiera ir y se lo contenga.

-¿Cómo trabajan el aborto?
-Se les da información cuando surge el tema. No se trata de la misma manera, en profundidad como la educación sexual. Depende de los grupos, de sus interrogantes. Cuando se toca el tema hay una continuidad en el sentido de que se realizan trabajos que se sociabilizan dentro de la comunidad escolar.

-¿Hay muchos embarazos que terminan en abortos?
-Es muy difícil registrar esto, porque incluso es difícil saber cuando una chica está embarazada. Son embarazos no deseados, por empezar y hay una negación de la situación, a lo que se suma la condena social, la culpa, que no sabe cómo decir lo que le pasa, que no sabe lo importante de su estado, no tiene una valoración del embarazo. Hay que trabajar muchísimo con la autoestima.

-¿Ves los cambios en las chicas?
-Sí, por ejemplo hubo un caso de una chica que tuvo un accidente y que fue a parar a la sala de maternidad del hospital. Allí observó el estado de desesperación de otras embarazadas y su desconocimiento. Y ella pudo transmitirles algo de lo que aprendió: valoró lo que había visto y transfirió esos conocimientos, pudo ser un soporte, así haya sido sólo por dos minutos.
Hay muchos cambios. Esta chica en particular, valoró la importancia del trabajo, de continuar con la escuela. Y esto tiene que ver también con el esfuerzo que se hace desde la escuela, con el apoyo de los docentes, como ocurrió con un caso de una chica que evidentemente estaba mal alimentada y que produjo la ayuda de mucha gente y el seguimiento. Más allá de los esfuerzos de la escuela y los docentes está la difícil realidad social que viven. Es muy importante que las escuelas y los docentes puedan con un pequeñísimo esfuerzo aportar en esta situación, sin mayores cambios en sus roles, aceptando sin condenar y aportando cada uno desde sus saberes y posibilidades. Esto cambia mucho la situación de tantas chicas. Es mucha la responsabilidad que implica involucrarse en la problemática de los alumnos y desde allí enfocar y abordar el trabajo escolar, son actitudes que hacen la diferencia para los chicos. Esa disponibilidad es valorada y reconocida, sobre todo cuando se puede dejar de lado los prejuicios.






espacio del lector
Nombre/seudónimo*
Edad * años
E-mail *
Comentario *
 
IMPORTANTE: Está terminantemente prohibido incluir agravios, calumnias, insultos, ataques a terceros, lenguaje inapropiado o cualquier comentario discriminatorio. Recordamos que no se publicarán comentarios que no respeten las reglas.


·
·
·

Copyright © 2008 El Ojo de la Tormenta - Reservados todos los derechos.

Lavalle 261, Oficina 5—Bº Centro - San Salvador de Jujuy (4600) - Jujuy - Argentina.
Teléfono: 0388-4235343 / Fax: 0388-4235343 - Correo: info@elojojujuy.com.ar

.   .