Próspero Nieva en la radio. Casi no dejó títere con cabeza. En el plano nacional, cargó contra el “modelo hegemónico” de Kirchner “habla -dijo- de una nueva política pero muchos de sus funcionarios son ex menemistas conspicuos”; respecto de Jujuy, afirmó que “el radicalismo avanza con muy buenas perspectivas hacia las próximas elecciones gracias a los candidatos que llevará el PJ: un conservador desde la cuna y un empresario supermercadista que viola las leyes laborales”. Para Nieva, viejo dirigente radical que se las tuvo que ver con un Carlos Snopek o un José Humberto Martiarena, “el peronismo jujeño está perdiendo su fundamento ideológico y la lucha interna por la senaduría es una lucha de pesos pesados del empresariado local”.

-¿Por qué la UCR no logra empuñar con fuerza su rol de oposición?
-Es lo que planteé en el último encuentro nacional, en Córdoba. Se habla mucho de partidos de oposición pero creo que, por ejemplo, Carrió, Lopez Murphy o Macri -que están muy en la palestra- son expresiones muy personales y de pequeños sectores. Entiendo que el verdadero partido de oposición es la UCR y las macanas y desvíos que hizo De La Rúa, que no cumplió con el pacto social, no pueden echar por tierra cien años de historia de nuestro partido. Al que quieren hacer desaparecer sectores de la prensa de Capital Federal. La UCR no fue. Se dijo lo mismo cuando cayó Illia y cuando se tuvo que ir Alfonsín por la crisis económica. No es así. Efectivamente hay una crisis, fuerte, pero no arrastra al partido a la extinción. Por el contrario, en muchas provincias como la nuestra, es Justicialismo o Unión Cívica Radical porque, no hay otra alternativa.

-¿Es lo mejor el bipartidismo?
-Es lo que hay. Lo que la historia fue definiendo en nuestro país y lo que el mismo electorado va mostrando, sobre todo en nuestra provincia. Por otro lado, en casi todos los países desarrollados del mundo pasa que hay dos partidos, que van alternado funciones en el poder y si uno mira Europa, se da cuenta que, hasta ahora, ha sido bastante exitoso.

-En la Unión Cívica radical, a nivel nacional, no aparece un hombre o una mujer con la vitalidad suficiente para conducir esta etapa...Es como que el fracaso de la Alianza y de De la Rúa hubiera dejado al partido muy maltrecho...
-El radicalismo siempre ha dado figuras importantes, generación a generación, pero no veo hsta ahora, efectivamente, una persona que haya tomado por las riendas la situación, pero en el pasado Congreso Federal de Córdoba -donde estuvieron gobernadores, legisladores nacionales y provinciales, intendentes y concejales y numerosos dirigentes de todo el país- hemos planteado la necesidad de fijar una estrategia de oposición férrea como conjunto y hemos fijado algo -que no trascendió como debiera en la prensa- que es nuestra oposición al proyecto hegemónico del presidente Néstor Kirchner. Eso es lo que hace falta, más que un nombre. Tiene que ser una estrategia de todos, común; que digamos no a este proyecto de Kirchner que no es solamente la Capital o la Provincia de Buenos Aires. Por ejemplo acá, si Rubén Daza va por fuera del PJ va a ser lo mismo que han hecho en La Rioja y que ahora quieren hacer en Buenos Aires y en otros lugares. O sea poner tres senadores de ellos. Los radicales, en cambio, tenemos un principio que dice que se rompa pero que no se doble. Que se pierdan cien gobiernos pero que se salven los principios. Da pena, da preocupación que el peronismo esté perdiendo en Jujuy su fundamentos ideológicos. Me acuerdo en mis años, en que luché férreamente con dirigentes justicialistas de la envergadura de don Carlos Snopek o de José Humberto Martiarena, que eran hombres del Movimiento Nacional Justicialista, realmente fuertes, con poder y convicciones, pero resulta que ahora nosotros tenemos que la lucha intestina de ese partido pasa por la senaduría y es una lucha de pesos pesados del empresariado jujeño, gente con poder económico pero sin convicciones ni ideología. Nada que ver con la gente que construyó al peronismo en la provincia

-No los ve peronistas...
-¿Pero qué peronistas? ¿Pero qué peronismo? Uno representa a la vieja estirpe conservadora como es Jenefes. Lo conocí a su padre, que fue un viejo dirigente demócrata y él heredó esa ideología, la mantiene en la práctica,  y ahora aparece como gran caudillo justicialista. Es una burla. No nos burlemos del pueblo.... y el otro candidato es el dueño del famoso supermercado de Jujuy que está en contra de lo que pregona Kirchner a nivel nacional, paga en negro a los empleados y luego, para no tenerlos en planta permanente los echa. Después de un período, los vuelve a tomar. No puede representar a Jujuy un violador de las leyes laborales.

-¿Cómo ve la situación de la UCR jujeña de cara a las elecciones de octubre?
-La veo fácil. Por lo que le decía de los candidatos a senadores del PJ y por lo que el intendente José Luis Martiarena está haciendo o no haciendo. Fíjese que nosotros los radicales se la hemos prestado muy temporariamente a la Municipalidad de la Capital al Partido Justicialista, porque el intendente, realmente, es un verdadero mamarracho, un desastre. Quien anda por las calles de Jujuy, quien las camina, lo dice. Pero también el que anda en vehículo. Yo quisiera que el intendente me acompañara, pero en su auto, y que yo lo maneje, para ver qué gauchada le hago a los que venden amortiguadores. Vaya por la Terminal de Ómnibus, una suciedad que es inaguantable. A los radicales, un poco apresuradamente nos han castigado por la pésima última gestión de Conde, pero nosotros llevábamos un candidato que había sido un lujo en la primera intendencia, como fue el Chuly Jorge. El pueblo -yo creo- va a revertir la situación y vamos a recuperar la Municipalidad de San Salvador de Jujuy.

-¿Pero hay una nueva política o no?
-Lo he puesto de manifiesto en el encuentro de Córdoba: aquí hay que hacerle recordar a la gente quiénes son los que están. Porque Kirchner graciosamente habla de la nueva política y de los nuevos políticos y se olvida de decir que son los mismos de la época de Menem. ¿Dónde estaba Kirchner cuando Menem privatizó YPF? ¿O dónde estaba Fellner cuando el gobierno de Menem graciosamente nos quita Altos Hornos Zapla? ¿Dónde estaban cuando Menem liquidó el ferrocarril a La Quiaca? Fellner fue ministro de la intervención federal que mandó Menem a Santiago del Estero. De la Sota fue embajador en Brasil. Y así un montón. Entonces de qué políticos nuevos me hablan. Siguen siendo los mismos.

-¿Un oyente le pregunta si se unirán los bloques en la Cámara?
-Se están haciendo los máximos esfuerzos y casi con seguridad le puedo adelantar que la UCR en Jujuy no hará elecciones internas porque se tratará de llegar al consenso con todos los sectores. En nuestro partido nadie está obligado a pensar igual que el otro, tenemos diferencias, aunque en definitiva, prima el pensamiento radical. Con Beller se está conversando. Vamos a llegar a una lista de unidad. Así como hemos conversado y acercado a trabajar a Ekel Meyer y a Mario Pizarro, así también será con todos, salvo con los defenestrados políticos que ya sabemos quiénes son.

-Le pregunta otro oyente ¿qué opina de Elisa Carrió?
-Esta señora plantea que se firme un pacto moral en la República, pero, precisamente ella es la que no tiene autoridad moral para hacerlo, ya que fue elegida, por la UCR de Chaco, diputada de la Nación. Cuando se fue del radicalismo, por contrato moral con el partido, tendría que haber devuelto la banca. Hay que ser coherente en la vida. Por eso creo que no tiene autoridad moral para hablar en contra del radicalismo, del presidente Kirchner, del peronismo, en contra de todos como hace. En Chaco no tiene nada. No existe. Si ella tuviera apoyo de la gente de su provincia se presentaría como diputada por ella, lo cual sería mucho más lógico. Sin embargo, lo hace por Capital Federal donde en base a lo que hace la prensa porteña, se convirtió en la gran figura. Pero es todo vacío, todo mediático. No creo que tenga un gran futuro.

-¿Cuál es su opinión sobre la protesta social tal como se la vive últimamente, piqueteros, cortes de rutaa, quema de gomas, etc.?
-Le doy un ejemplo, la semana pasada, llegó un avión con un contingente de turistas extranjeros y no había poder humano que les permitiera entrar a la Capital de la provincia y el gobierno, que habla del turismo como una fuente importante de ingresos y que apuesta al futuro, no hizo nada de nada. Yo los respeto a los piqueteros en su necesidad, pero no considero que los cortes sean el método viable. Por otro lado, a mí me han contado, y que me desmientan si no es cierto, que en la calle Alvear al lado del cine hay una vieja casona que quedó deshabitada luego del asesinato de sus propietarios y nadie la podía comprar por la elevada suma que pedían ¿y al final sabe quién la compró? los piqueteros, la compró ATE. Si no tienen plata, por qué esos 180 mil pesos no los invirtieron en bolsones escolares para los pobres que ellos mandan a manifestar. Además ¿por qué no hay una política para defender al turista? No sólo respecto de los cortes. En Tilcara, para Semana Santa, cada empanada en el Mercado, valía 1 peso. Acá en Jujuy la docena se está vendiendo a 4 o 5 pesos. ¿Así podemos solucionar el problema del hambre y de la desocupación? No hay criterio ni planificación.

-¿Pero acaso se puede regular los precios?
-Creo que un contralor tiene que haber. A mí me han enseñado en derecho que el interés personal cede ante el interés general. Creo que no es difícil. Es cuestión de voluntad, porque después viene el negocio electoral y cuando llegan las elecciones, ahí van todos. Porque parecería ser que están necesitando que haya pobres, que algunos sectores de la política quieren que haya muchos pobres, así se puede ir con una canastita de mercadería para captar el voto. Mientras aquí haya pobreza, esto va a suceder, como también si falta educación. Un pueblo que carece de educación, es fácil presa de los peores políticos.

-A este programa últimamente ha venido gente de Colombia, Chile, Perú, Bolivia, con distintos temas y, evidentemente, pasa lo mismo en todos nuestros países...
-Es que Latinoamérica ha sido la presa del Fondo Monetario Internacional. En eso tenemos que unirnos todos los argentinos -peronistas, radicales, socialistas, todos- porque realmente este es un problema continental frente al poder económico y tecnológico de Europa y de América del Norte, sobre todo.

-Volviendo a las elecciones, hace dos años y antes también, ustedes hicieron distintos frentes y/o alianzas y no resultaron nada felices, sobre todo para la dirigencia radical de algunos lugares. ¿Qué van a hacer esta vez?
-Es un tema muy difícil; yo no he compartido las iniciativas de los queridos jóvenes que están conduciendo el partido, porque mucha gente, sobre todo peronistas renegados han querido ir con nosotros, y cuando llegaron a las bancas o a los cargos se entregaron a la voluntad del gobierno provincial y se olvidaron por donde accedieron. Siempre digo, el radical que se va no vuelve más, en cambio el peronista que usa la puerta giratoria y entra de nuevo al PJ. Y eso es lo que hace difícil cualquier frente que se quiera armar. Creo que hay que formarlo sí, pero pensar más de una vez con quién se lo hace.

-Ud. dice que les va a ir muy bien en octubre, pero Eduardo Fellner está tan bien en las encuestas que impacta...
-Hay encuestas y encuestas. Es lo mismo que a nivel nacional. Eso lo dijo alguien en el Congreso de Córdoba, algunas encuestas con elevadísimos porcentajes de Kirchner no son reales. Acá hay mucha gente decepcionada de Martiarena y, sobre todo de los candidatos a senadores, los propios peronistas en primer término. Fellner, como no es candidato a nada, parece como si estuviera por encima de todas las rencillas internas, pero él no va a estar en las listas. Acá, por ejemplo, él mira para otro lado en el asunto de la Municipalidad. Los concejales justicialistas, por medio de Alderete, le han planteado la situación, la crisis, en la Municipalidad, porque se dan cuenta de que van al fracaso y han dicho, díganle al gobernador que tome cartas en el asunto porque esto no da para más y vamos a perder en Capital. Eso, hasta el más imberbe, se da cuenta. Y sin embargo, Eduardo Fellner mira para otro lado, no quiere problemas, pareciera ser que está confiado en que van a ganar en Capital a pesar del desastre; que ganen, lo veo muy difícil. Le aseguro, como viejo político, que esta vez la tenemos fácil.