Cintia Canedi, Cristina Galarza, Angélica Rubio y Romina Cabana, docentes del Colegio Martín Pescador, junto a alumnos de la Primaria y el Polimodal, estuvieron en la radio para hablar sobre la II Jornada de Filosofía de la Escuela, en homenaje a la profesora Beatriz Bruce, pero más que nada mostraron la importancia de la filosofía en la vida: saber escuchar y respetar al otro.
¿Cómo empezaron con filosofía en la escuela Primaria?
-Canedi: Hace 15 años empezamos a estudiar unos apuntes sobre filosofía, junto con Negrita Brizuela, la directora general del colegio, y con otros docentes de Nivel Inicial y de Primaria. Decidimos tomar cursos y capacitación. En ese momento yo era docente de sala de 5 y me fui a Buenos Aires a un seminaria, de donde volví con una propuesta para incorporar filosofía desde la sala de 5. Nos entusiasmamos y decidimos institucionalizarlo. A partir de ese momento empezamos a trabajar en las sesiones filosóficas desde la sala de 5, que son momentos en que todos nos sentamos a pensar en determinados temas y a discutirlos. Desde allí, comenzamos este camino desde el hacer filosofía, y no desde una historia de la filosofía, que por ahí es más lo que nos han enseñado en el secundario. Es sentarse a discutir y a pensar sobre un montón de cosas que les interesan a los chicos en los distintos momentos de sus vidas.
¿Cómo trabajan los docentes, qué estrategias utilizan para poder hacer filosofía en sala de 5?
-Hay un programa de filosofía para Niños, que sale desde EE. UU. De la mano de Lipman y de Anne Sharp, que después lo implementan acá desde el centro de Filosofía para Niños de Argentina, Estela Corinti y Gloria Argonés, y que incluye un montón de actividades para que los chicos se aproximen a los que son las herramientas de discusión filosófica. Por eso en sala de 5 lo primero que hacemos es buscar ese acercamiento a las preguntas, las razones, las ambigüedades, que son las herramientas, a partir de una serie de estrategias, algunas que hemos tomado de este programa y otras que hemos ido encontrando por nuestra propia práctica, y más el aporte de grandes de la filosofía como Walter Cohan y Maximiliano López, a quienes tuvimos el gusto de recibir en la escuela. Todo esto nos permite ir viendo qué cosas podemos ir haciendo; algunas vamos modificando y otras sostenemos. Entre las estrategias, están los juegos, actividades como títeres, muñecos, modelado, masa, dibujos, que les permiten ir reflexionando.
-¿Desde hace cuánto tiempo que se realiza la Jornada de Filosofía en el colegio?
-Rubio: Esta fue la segunda jornada institucional. Esto implica que toda la escuela se participa en una jornada de trabajo, un día. Los más chicos con sesiones de discusión filosófica y los más grandes con ponencias. Esta trayectoria de la que hablábamos antes, hizo que cuando aparece la posibilidad de participar en las Olimpiadas de Filosofía -que es un evento a nivel nacional- el colegio participe activamente. En la organización de las jornadas está involucrada toda la institución y en esta instancia se selecciona los trabajos de los chicos que van a participar en la etapa interescolar. Este año, la particularidad de la Jornada fue que los chicos no sólo expusieron sus trabajos en mesas ante un tribunal, que además oficiaba de jurado, también hubo actividades alternativas relacionadas como una mesa de Arte y Filosofía, Mitos y Leyendas. Así se incorporan una serie de actividades que enriquecen el trabajo.
-¿Qué ven en los chicos, hay cambios que este tipo de discusiones permiten? ¿Otras maneras de actuar, de pensar?
-Canedi: Lo más gratificante y lo que no te deja de sorprender es el cambio que se va produciendo. En sala de 5 empiezan a entender lo que significa escuchar al otro. Van incursionando en el manejo de algunas herramientas. Luego, uno los ve discutir pasados los años- con una capacidad de movilizar su propio pensamiento, de discutir las ideas del otro y escuchar lo que el otro dice. Se ve una apertura de pensamiento, poder tomar el pensamiento del otro, tenerlo en cuenta, con todo lo que significa escuchar; la utilización de herramientas como inferencia de ideas, descubrimiento de supuestos, pensamiento crítico, creativo y cuidadoso del otro. Puedo decir lo que pienso pero estoy dentro de un grupo y no puedo dejar de tener en cuenta que estoy dentro de un grupo. (Ariadna Tabera).
LOS CHICOS TAMBIÉN HABLARON
“En el debate que hicimos escuchamos un tema musical, de ahí seleccionados una idea y propusimos lo que esa idea nos sugería. Lo que más nos interesó fue la felicidad y la infelicidad. De la canción fuimos sacando frases y ahí aparecieron las ideas”.
“En la sesión surgieron preguntas entre los chicos de 5º y 6º. A partir de una frase, en la canción se relacionaba a la muerte con el sol, y de ahí empezamos a discutir. Cada uno expresaba lo que pensaba sobre esto y el sentido iba cambiando”.
“No todos tuvimos el mismo pensamiento, y cerramos la sesión con preguntas. Más adelante las vamos a ir respondiendo”.
“Para participar en las Olimpíadas trabajamos con tema libre, que luego relacionamos con los temas propuestos para las Olimpiadas nacionales. Recurrimos a material bibliográfico, más nuestro propio aprendizaje porque tuvimos filosofía desde 7º grado”.
“La filosofía ayuda un montón. No es una materia al vicio. Es importante porque la usás en la vida. Me di cuenta de que nos ayuda a abrir la cabeza, a preguntarnos más las cosas”.